Por Carolina Ruiz (@carolinarq96)

Era la década del 70, la época dorada del fútbol peruano, y la selección nacional era vista como un rival respetable ante sus adversarios. Pocos fueron los privilegiados que cumplieron el sueño de representar a Perú y llevarlo a un torneo mundialista, como fue el caso de Guillermo Claudio La Rosa Laguna, quien fue uno de los goleadores en la exitosa campaña que nos llevó al Mundial de España 82.

Dentro de los grandes atacantes se encontraba un niño de cabello rizado, ojos saltones y de carismática sonrisa, que jugaba sin zapatos con una pelota de trapo en el distrito de Puente Piedra; él tenía un héroe que lo inspiró hasta el último día que estuvo en la cancha, su padre, don José La Rosa Aguilar, futbolista amateur e hincha del club Alianza Lima.

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El ‘Tanque’ más famoso del Perú

Su peculiar forma de cabecear, la potencia en el salto y el choque con sus rivales hicieron que la prensa nacional lo tildara con el apelativo del ‘Tanque’, volviéndose el favorito de muchos hinchas peruanos. Gracias a sus grandes dotes en el fútbol y juego quimboso, años más tarde se consolidaría en uno de los equipos más importantes del balompié peruano.

En 1973 Defensor Lima lo contrataría, ganando ese mismo año el campeonato nacional. En aquel equipo compartió vestuario con Roberto Challe y José Fernández. Su buen juego y lo incisivo que era en la cancha haría que el Sport Boys necesitara no solo un goleador, sino también un jugador que lo dejara todo en la cancha. Guillermo La Rosa no decepcionó a la hinchada rosada, ya que llegó a ser uno de sus máximos goleadores durante el campeonato de 1976 y 1977.

“En 1978 jugué en Alianza Lima con estrellas como Cueto, Velásquez, Cubillas y Sotil. Se había cumplido mi sueño, defender los colores de Alianza Lima”, aseguró La Rosa al momento que cerró el contrato con el club íntimo.  

La blanquirroja en el corazón

Su carisma, sencillez y capacidad goleadora haría que La Rosa encaje perfectamente en el seleccionado nacional, compartiendo amistad y camerino con Teófilo Cubillas, José Velázquez y Jaime Duarte.

Con 25 años había logrado estar en innumerables recintos deportivos, codeado con grandes talentos del fútbol peruano, siendo reconocido por la destreza en sus pies. Cumplió muchos de sus sueños, pero no pudo lograr uno, que sería el más importante en su vida: que su padre lograra ver hasta dónde podría llegar su pequeño guerrero.

En 1979 Colombia sería su primer destino internacional y el Atlético Nacional de Medellín  pondría sus ojos en el ‘Tanque ‘, atraído por su vigoroso físico y su raza goleadora que imponía respeto ante sus rivales. “Los entrenamientos y las tácticas eran más fuertes que aquí en el Perú”, recuerda La Rosa.

Vestir la camiseta blanquirroja fue uno de sus más grandes sueños. Entre pases, jugadas, puntazos y toques, La Rosa no solo demostraba que era muy bueno en el fútbol sino también en su búsqueda de Dios, a quien agradecía antes y después de cada partido.

En 1981 la selección peruana anunciaba la convocatoria de sus mejores jugadores y La Rosa esperaba su llamado metiendo goles desde Medellín.

“Cuando regresamos a defender los colores de nuestro país estábamos bien técnica y físicamente”, afirmaba el ‘Tanque’, quien formaría la delantera en las Eliminatorias de España 82, bajo las órdenes de Tim.

El cabezazo que dejó mudo a Colombia

“Todo el mundo pensaba que los que irían al Mundial serían Colombia y Uruguay”, afirmó La Rosa al referirse a los países favoritos de aquellos años.

El primer rival que enfrentaríamos sería Colombia, en su cancha, en el Nemesio Camacho, El Campín de Bogotá. La bicolor demostraría su dominio con la pelota poniendo al equipo cafetero en aprietos. Sin embargo, Herrera marcó el primero de la tarde a los 74’ que paralizaría las esperanzas de un buen resultado en tierras cafeteras.

Pero Guillermo La Rosa marcó el empate faltando cinco minutos para que acabe el partido y con ello provocó la alegría de todo un país que lo veía por televisión.    

“‘Patrulla’ hizo una buena jugada por el centro y yo cabeceé. Nunca pensé saltar tan alto y cabecear tan duro. Es un cabezazo que paralizó todo Colombia”, recuerda con emoción La Rosa.

Se enciende la ilusión

Colombia esperaría la revancha en Lima, pero la selección no estaba dispuesta a dejársela fácil. Corrían los primeros 10 minutos del encuentro y Juan Carlos Oblitas da un pase largo por la banda izquierda hacia Gerónimo ‘Patrulla’ Barbadillo, quien con un cabezazo marcaría el primer gol en el Nacional. Ya en el segundo tiempo, Julio César Uribe anota de penal a los 71’, cerrando la victoria frente a los colombianos.

(Podcast) Guillermo La Rosa, el ‘Tanque’ de España 82

El ambiente mundialista ya corría en las calles, se respiraba en el pueblo peruano, incluso antes de que viajaran al difícil Centenario de Montevideo. Era un partido difícil porque los charrúas venían de campeonar en el ‘Mundialito (o Copa de Oro, torneo en el que participaban todos los campeones del mundo).

El centenariazo

Fue un partido histórico donde todo el equipo brilló y apagó el cartel de favoritos que tenían los uruguayos. El ‘Tanque’ La Rosa y el ‘Diamante’ Uribe fueron los héroes de aquella tarde que es recordada hasta el día de hoy.

“Ellos estaban muy seguros. Nosotros teníamos la seguridad anímica y un buen equipo, queríamos sacar un buen resultado. Tim nos motivaba diciéndonos: ¡Vamos a ganar!”, recuerda.

Aquel día le salió todo a Perú y el primer golpe lo dio Guillermo La Rosa. La jugada empezó en una corrida por la banda izquierda de Juan Carlos Oblitas, quien deja atrás a los defensas y da un pase al ‘Tanque’ que fusila de un potente derechazo al portero charrúa. Era el 1–0 que enmudeció el Centenario.

“Uribe hizo una finta por el lado izquierdo y le dio un pase a Oblitas. Oblitas tenía dos opciones: Dar la pelota a ‘Patrulla’ o me la daba a mí y decidió dármela a mí y yo pateé e hice el gol”, recuerda La Rosa, quien fue el goleador en los partidos de visitante en la campaña al Mundial de España 82.

La selección siguió dominando el encuentro y en una magnífica jugada de José el ‘Patrón’ Velásquez, quien irrumpió en el ataque, dejó la pelota servida para que Julio César Uribe defina de un potente disparo al lado izquierdo del guardameta uruguayo y marque así el sorpresivo 2-0. Uruguay, empujado por su afición, logró decretar el descuento por intermedio de Victorino, pero el resultado ya no se movería. Perú había ganado de visita al favorito Uruguay y el Mundial España 82 estaba casi en nuestras manos.

(Traíler) Guillermo La Rosa

El Team de Tim

El ambiente de la selección era divertido y cálido a la vez, quizás ya se respiraba aroma de mundial.

“Cada uno actuaba según el nerviosismo que tenía, algunos escuchaban música, otros no querían ni hablar, como yo, yo no hablaba. Todos éramos tranquilos. Entre los más disciplinados estaban Oblitas y Chumpitaz. El más chacotero era Cueto, aunque parezca mentira. Los más entusiastas eran ‘Patrulla’ Barbadillo y Uribe. Eduardo Malásquez era el que ponía apodos. Y entre los más puntuales estaban Oblitas, Chumpitaz y el que habla”, recuerda el ‘Tanque’ a aquella gloriosa selección que sacó gritos de alegría al pueblo peruano.

Boleto al Mundial
El último encuentro, esta vez en Lima, indicaba que Perú con un empate estaba dentro de la próxima cita mundialista. El partido se tornó complicado para Perú, sin embargo, el empate se mantuvo hasta el final del encuentro. Perú había clasificado a España 82.

“Cueto estaba llorando, yo también estaba llorando. Hay una foto donde estoy llorando con el jefe del equipo. Chumpitaz también lloraba. Todo el mundo lloraba porque es una cosa espectacular, una alegría tremenda ir a un Mundial”, comenta emocionado Guillermo La Rosa al revivir el momento mismo cuando el árbitro finalizó el partido.

 

El sueño de un Mundial

Los camerinos eran una fiesta. “Es como si te hubieses sacado la lotería”, menciona  el ‘Tanque’ con su carismática sonrisa, mientras mira fotografías del recuerdo.

“Pensé en mi padre. Dije, papá, gracias por apoyarme, por lo que tú me querías. Agradecí a mi padre, a mi madre, a mi esposa. Eran unos sentimientos que llenan tu corazón porque todos ellos te han apoyado para que estos sueños se hagan realidad”, expresa emocionado el goleador de aquella campaña y quien hoy se dedica en la formación de menores en la Escuela de Fútbol Cueto La Rosa.

#PerúaEspaña82 es un documental transmedia de Aficionline.com que busca revivir en tiempo real, 36 años después, la última clasificación de Perú a un Mundial. Síguenos en Facebook, Twitter e Instagram.

 

PRODUCCIÓN TRANSMEDIA: 

Edición audiovisual: Carla Torrejón (@CarlaTorrejonT)

Entrevista en video: Carolina Ruiz (@carolinaRQ29)

Cámaras: Johnny López (@johnny_lopezc) / Sebastián Morote (@dkgjdslgjsljd)

Redacción Web: Carolina Ruiz (@carolinaRQ29)

Asistente de producción:  Mabel Romero (@mabessence) / Joaquín Castañeda (@joaquinrenato) / Sandra Estela (@sanola)

Producción Podcast: 

Edición: Mabel Romero (@mabessence)

Locución: Mabel Romero (@mabessence)

Cortina: Sandra Ramírez (@SandraRamirezCh)

Fotos: César Cusirramos (@CesarCusirramos)

Gráfica: Sandra Ramírez (@SandraRamirezCh)

Trailer (edición):  Carla Torrejón (@CarlaTorrejonT)

Imagen interactiva: César Cusirramos (@CesarCusirramos)

Archivo y sonido :  Mauricio Ubillús (@MauricioUH04)/ Jean Sovero (@jeansovero16) / Gabriela Sánchez (@ConcretayAbstra) / César Cusirramos (@CesarCusirramos)