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Benfica vs Bela Guttmann

El entrenador húngaro le tiró una maldición al Benfica (Foto: La información).
El entrenador húngaro le tiró una maldición al Benfica (Foto: La información).

Por Bruno Uceda

Hoy se juega la final de la Europa League con un hecho sumamente curioso, pues el cuadro portugués posee una maldición que le impide ganar un título internacional, ya que hasta el momento ha jugado seis finales europeas y todas las ha perdido.

Esta maldición nos lleva a retroceder varios años, cuando el entrenador húngaro Bela Guttmann llegó al Benfica en 1959, donde en su primera temporada ganó la liga y con ello el pase a la Copa Europa. En este torneo Real Madrid era el gran dominador, con cinco sorprendentes títulos, no obstante el Benfica comenzaría a escribir una nueva historia.

En 1960 el cuadro luso participaría por segunda vez en la Copa Europa, llegando a la final contra el Barcelona, al cual vencería por 3-2 con un dato bastante curioso, pues los catalanes mandaron el balón a besar el larguero en cuatro oportunidades.

Al año siguiente el Benfica volvería a sorprender a todos al vencer a un equipo español, esta vez sería al gran Real Madrid, enfrentándose de esta forma los únicos campeones de este torneo. El partido fue en el Estadio Olímpico en Amsterdam, donde el marcador final fue favorable para los lusitanos, que terminaron con otro título más para sus vitrinas.

Tras conseguir el bicampeonato europeo, el entrenador húngaro decidió pedir un aumento por los títulos logrados, sin embargo, lo único que consiguió fue ser despedido y con ello vino la maldición hacia al cuadro lusitano. Pues el ya despedido técnico, dijo las siguientes palabras «sin mí, el equipo no ganará un título europeo en 100 años».

Palabras que hasta el momento se han dado, pues el Benfica ha disputado cinco finales de Europa League y una de Champions League, perdiéndolas todas. Con lo que ya van 51 años sin conseguir un título europeo.  Ahora el cuadro portugués vuelve a jugar en Amsterdam, donde ganó su último título internacional, solo que en un estadio diferente. ¿Podrá romper la maldición?

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